¿Cómo desarrollar el plan estratégico de una empresa?

La planificación estratégica es una actividad de gestión organizacional que guía las decisiones empresariales y ayuda a establecer los propósitos y prioridades de las empresas.

Dentro de la gestión organizacional el elemento nuclear es el plan estratégico, también conocido como planeación estratégica, el cual es una herramienta fundamental para el crecimiento y el éxito de toda organización. 

Se trata de un documento que establece medidas futuras, los objetivos de la empresa a largo plazo y define un plan de actuación que la organización debe seguir, para alcanzar los objetivos estratégicos y disminuir los riesgos e incertidumbre en el mercado.

Desarrollar un plan estratégico o plan de negocios permite a las organizaciones definir las acciones a realizar, con un plan de acción claro y concreto con el fin de contribuir a tomar decisiones importantes sobre recursos, inversiones y desarrollo. 

¿Para qué sirve?

Una planificación estratégica de negocios ayuda a las empresas de varias formas: 

• Determinar metas y objetivos: en todo proceso de planificación, el primer paso es definir lo que se quiere lograr. Un buen plan estratégico puede ayudar a una empresa a determinar objetivos alcanzables a corto plazo, mediano y largo plazo.

• Determinar estrategias: después de definir el alcance de un proyecto, es necesario tener un mapa estratégico para lograrlo. Como por ejemplo, expandirse a nuevos mercados, crear nuevos productos o servicios u optimizar estrategias de marketing y ventas, entre otros aspectos.

• Asignar recursos: en cada tipo de estrategia empresarial hay que asignar recursos humanos y económicos para las diferentes áreas de la empresa. Así que hay que decidir cuánto dinero, tiempo y personas va a comprometer la organización en cada estrategia.

• Monitoreo del progreso: una planeación estratégica no debe ser un documento estático, sino que debe ser una hoja de ruta que hay que supervisar y actualizar de forma constante. Esto permite observar los cambios en el entorno empresarial, hacer seguimiento del progreso y apreciar si se están logrando los resultados esperados.

• Comunicar la cultura corporativa: el plan de negocios estratégico sirve para comunicar la misión, visión y valores a los empleados, inversores y personas relacionadas con el negocio. Esto ayuda a integrar a empleados y agentes externos en torno a una visión común y garantizar que todos estén trabajando hacia los mismos objetivos.

Como observas, una estrategia empresarial puede utilizarse con diversos objetivos y, también, tiene ciertas características que la definen. ¡Te decimos cuáles son!

¿Cuáles son sus principales características?

Las características de un plan de negocios estratégico varían según el tamaño, complejidad y razón de ser de cada empresa, así como las metas y objetivos estratégicos que se quieren lograr. 

Sin embargo, hay 4 características básicas que identifican todo plan de negocios. ¡Veamos cuáles son!

• Cuantitativo: objetivos medibles, es decir, poner en cifras los resultados que se quieren obtener.

• Personalizado: qué persona del equipo de trabajo realizará cada tarea.

• Descriptivo: plan de actuación donde se establece con exactitud cada estrategia a llevar a cabo.

• Temporal: hoja de ruta donde se indican fechas y plazos de cada tarea a desarrollar en el plan.

De modo que un plan estratégico es una herramienta fundamental para cualquier empresa u organización, por pequeña que sea, con o sin ánimo de lucro, por eso es fundamental saber cómo elaborarlo. ¡Acá te lo explicamos!

Una planeación estratégica no debe hacerse a la ligera, sino que requiere de un proceso cuidadoso y estructurado para poder lograr un resultado real y perceptible.

Veamos entonces las etapas clave para crear un plan estratégico efectivo y cómo adaptarlo a las necesidades y características específicas de tu empresa.

Evalúa tu punto de partida o posición actual 

El primer paso debe ser el estudio de tu situación actual. Esto es, el análisis externo y análisis interno de la empresa, en relación  con su estrategia comercial actual, público objetivo, fortalezas y debilidades y, en general, el panorama competitivo al que te enfrentas, lo cual te ayudará a determinar las necesidades u otros puntos que se deberán abordar de forma correcta.

Conocer el entorno 

Luego de evaluar tu situación actual, hay que ir más allá y saber qué factores externos pueden afectar a tu empresa. Utilizar el análisis PESTEL te permitirá hacer una evaluación global desde el punto de vista económico, político, social, tecnológico, ambiental y legal y cómo todos esos factores externos pueden afectar a tu organización para una mejor toma de decisiones. 

Define tus metas y objetivos

¿Qué quieres alcanzar a corto plazo, mediano plazo y largo plazo? Debes definir las metas específicas que tu empresa quiere lograr, así como los objetivos factibles y medibles que utilizarás para hacer un seguimiento y encontrar las oportunidades que existen en el mercado. 

Realiza tu planificación estratégica 

¿Cómo lograrás esas metas y objetivos? Esto supone considerar la posibilidad de innovar en tus productos o servicios actuales, crear nuevos productos para diferenciarte de otros de tu mismo ramo, incorporar nuevas tecnologías, abrirte a la posibilidad de mercados internacionales, entre otras ideas, que te ayudarán a tener ventaja competitiva y apostar por el cambio. 

Ejecuta la estrategia

Crea un plan de acción. Para eso, describe las tareas específicas que se ejecutarán, incluidas asignación de responsabilidades a cada miembro del equipo de trabajo, plazos de ejecución, partida presupuestaria y recursos necesarios. 

Todos tus colaboradores deben estar al tanto de la dirección que va tomar la empresa para trabajar de forma eficiente, pues no es lo mismo aplicar un plan de marketing que un plan de reducción de costos. 

Analiza y actualiza tu plan 

Haz un seguimiento constante del progreso para conocer si estás teniendo éxito o realiza los cambios que sean necesarios para adaptarte a las necesidades del mercado y de los clientes. 

Ya sabes, entonces, cuál es el camino a seguir para la elaboración del plan estratégico, pero hay que mencionar que existen, además, algunos elementos fundamentales que debes tener en cuenta para trazarlo.

Para desarrollar un buen plan de negocios, hay que intentar abarcar una serie de elementos que, por lo general, se contemplan desde el inicio de todo proyecto empresarial y son fundamentales dentro de toda propuesta de valor. 

Cultura Corporativa

Es una declaración clara y concisa de cuál es la misión, visión y valores de la empresa que ayuda a definir el propósito de la empresa y cuál es su razón de ser. 

Difundir la misión, visión y valores permite alinear los objetivos de los empleados con los objetivos de la empresa y favorece la cohesión y el compromiso de los colaboradores con la organización. 

Objetivos SMART

Trazar un mapa estratégico con objetivos específicos, medibles, alcanzables, relevantes y limitados en el tiempo, los cuales la empresa desea alcanzar.

Estrategias 

Crear un plan estratégico empresarial de alto nivel, donde se detalle cómo la empresa logrará sus objetivos.

Tácticas

Desarrollar un plan de actuación donde se precisen las acciones que se llevarán a cabo para implementar las estrategias a corto plazo, mediano y largo plazo.

Métricas

Los criterios que se utilizarán para medir con datos específicos la eficiencia de las operaciones de la empresa y tomar decisiones informadas para el rendimiento empresarial.

Análisis FODA

El análisis interno y externo a través de la técnica de FODA, también conocido como análisis DAFO o matriz DAFO, permite ponderar la situación actual y futura del negocio.

Implica evaluar las fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas de la empresa, así como la ventaja competitiva y las características de los clientes, para obtener un diagnóstico del potencial de la empresa y de las estrategias a seguir.

Ahora bien, cada uno de esos elementos deben complementarse con acciones concretas, para formar un plan estratégico sólido y efectivo. Te mencionamos algunas acciones que puedes implementar:

• Integración de soluciones de pago en línea: el plan estratégico de una empresa debe incluir una estrategia sólida para maximizar las ventas por internet. Una plataforma de soluciones de pago en línea como Conekta puede integrarse perfectamente en la estrategia de ventas y contribuir al crecimiento del ecommerce.

• Optimización de la experiencia de compra: dentro de la elaboración del plan estratégico, es esencial tener en cuenta la experiencia del cliente y una estrategia omnicanal. 

En este sentido, cuando cuentas con una pasarela de pago en línea a la medida de tu empresa, ofreces una mejor experiencia de compra al proporcionar distintos métodos de pago y, además, seguros, rápidos y convenientes. Esto fomenta la fidelización de tus clientes y aumenta las conversiones.

• Análisis de datos y toma de decisiones: el plan estratégico empresarial debe basarse en datos y análisis sólidos para respaldar las decisiones que tomarás y también ayudar a conocer cómo es el comportamiento del consumidor.

Las plataformas de pago en línea proporcionan información valiosa sobre las transacciones y los patrones de compra, lo que permite a las empresas tomar decisiones más informadas sobre sus estados financieros o contables, y ajustar su estrategia según sea necesario.

• Seguridad y protección contra fraudes: la seguridad financiera es un aspecto fundamental en cualquier plan estratégico. Utilizar una confiable plataforma de pago en línea ofrece altos estándares de seguridad y protección contra fraudes, lo que ayuda a las empresas a salvaguardar su reputación, evitar pérdidas financieras y construir la confianza de los clientes.

Ahora bien, llegado a este punto, ya sabes que la planeación estratégica es una herramienta fundamental para enfrentar los retos, desafíos y problemas que van surgiendo dentro de las organizaciones, pero ¿sabes en qué favorece a las empresas? ¡Te lo decimos!